Hoy en día ninguna empresa se plantearía tener determinados servicios internalizados: la limpieza, la seguridad o la logística, por poner algunos ejemplos, son áreas que habitualmente son subcontratadas.
La tendencia en las empresas es aligerar las estructuras y mantener internamente sólo aquello que se considere estratégico dentro del negocio.
Esto es todavía más patente en empresas de nueva creación que nacen con estructuras mínimas, pocos costes fijos y gran parte del coste variable, con el fin de no lastrar el crecimiento inicial, y ser más fléxibles y dinámicas.
Por eso, cada vez es más habitual adquirir productos en régimen de alquiler frente a comprarlos. Productos que, mediante una cuota periódica, te ofrecen el producto físico junto con un conjunto de servicios.
Un ejemplo que todos conocemos serían el renting de vehículos o de equipos informáticos. Pocas empresas se plantean hoy día comprar estos productos, sino que los adquieren en unas condiciones que les permiten disfrutarlos, sin tener que preocuparse por el mantenimiento o la renovación cuando se quedan obsoletos.
En línea con esta tendencia, y en paralelo al desarrollo tecnológico, han surgido nuevos modelos de negocio basados en ofrecer servicios e infraestructuras en la nube que permiten ganar competitividad sin necesidad de hacer grandes inversiones y facilitar su escalabilidad a medida que el negocio lo requiera.
Por ejemplo, frente a tener grandes servidores de datos como antaño, hoy en día se opta por servicios de almacenamiento en la nube, como pueden ser Dropbox o Drive. Si tu empresa crece, contratas más espacio, incrementas tu cuota mensual, sin necesidad de hacer grandes inversiones.
O herramientas de productividad imprescindibles como Office ya se ofrecen también en la nube, lo que permite tener siempre la versión más actual, sin necesidad de tener que hacer instalaciones una a una en los dispositivos de los usuarios.
Y cada vez más los sistemas de gestión interna (ERP) también se contratan en base a una suscripción que te permite ir creciendo a medida que tu empresa crece y disponer siempre, y sin necesidad de hacer nada por tu parte, de la última versión del programa.
Es decir, que casi cualquier producto es susceptible de ser ofrecido como un servicio de suscripción y, como no, la conexión WiFi también puede ofrecerse como un servicio, lo que se conoce como WiFi as a Service.
WiFi as a Service es ya una realidad
En EEUU y Europa WiFi as a Service (WaaS) es ya una realidad, con un mercado que crece a cifras de dos dígitos, según el estudio WIFI as a Service Market: Global Forecast to 2021 de Markets&Markets 2016.
Y no es para menos: vivimos en un mundo donde ya no es posible estar sin conexión a la red, y el WiFi se ha convertido en una utilidad imprescindible, como puede ser la electricidad: ya no es un «nice to have» es un «must have».
Disponer de conexión permanente, de calidad, rápida y segura es un factor clave de la competitividad de las empresas. Sin ir más lejos, en los ejemplos expuestos anteriormente hemos visto cómo las empresas usan cada vez más servicios en la nube por lo que la conectividad es fundamental para su operativa diaria.
Pero, disponer de este tipo de conexión no es sencillo: necesitas contar con muchos componentes de infraestructura de red, diseñados específicamente para cumplir con las expectativas del usuario y del rendimiento, así como realizar una gestión continua por parte de técnicos especializados para mantener las cosas funcionando al máximo.
Además, debido a que el ciclo de vida de los productos tecnológicos se va acortando cada vez más, hay que estar constantemente actualizando para mantenerse al día de los nuevos estándares que van surgiendo (¿quién no ha sentido que su flamante móvil en un año está obsoleto?).
¿Quién puede permitirse eso? pues en realidad pocas empresas.
Por eso, las soluciones WaaS está en pleno crecimiento, y cada vez más empresas optan por esta alternativa para mantener la productividad y la satisfacción de los clientes.
¿Qué es WiFi as a Service?
WiFi as a Service es un servicio basado en una suscripción periódica que combina tres elementos clave:
- Infraestructura: todo el hardware y el equipo necesario para ofrecer una conexión de calidad.
- Software: soluciones a medida de las necesidades del cliente, que permita administrar la red centralizadamente y con visibilidad en tiempo real.
- Servicios administrados por personal técnico especializado de forma remota y 24/7. Esto permite disponer de un servicio de alta disponibilidad, constantemente monitorizado para resolver cualquier incidencia que surja, con actualizaciones dinámicas del firmwar, así como informes periódicos de funcionamiento.
La empresa paga una cuota mensual y obtiene un servicio de conexión a la red de calidad, segura, con alta disponibilidad y que se actualiza a medida que la tecnología evoluciona, sin necesidad de estar pendiente de ello.
Un servicio llave en mano, de un elemento clave para la competitividad, asequible y que elimina cualquier «dolor de cabeza» respecto a la tecnología.
Ventajas del WiFi as a Service
Con todo lo dicho anteriormente, se puede inferir que WiFi as a Service (WaaS) es una solución que aporta grandes ventajas a las empresas:
- No requiere un desembolso grande de capital, lo que permite a las empresas utilizar dicho capital en otros proyectos críticos para su crecimiento
- Un pago mensual y te olvidas, convirtiendo un coste fijo en un coste variable que se adapta a las necesidades de la empresa en cada momento.
- Garantiza una gestión continua realizada por personal especializado durante todo el ciclo de vida de la infraestructura, lo que facilita una transición fluida cada vez que su red necesite ser actualizada.
- Dota a la empresa de gran flexibilidad y dinamismo sin atarse de por vida a una infraestructura que se queda rápidamente obsoleta.
- Simplificar la operativa diaria de la empresa: la conexión WiFi simplemente «funciona», igual que la luz se enciende cuando das a un interruptor, sin necesidad de crear quebraderos de cabeza.
Con una solución WiFi as a Service, como la que ofrece Tecteco, disponer de de WiFi seguro y de calidad ya no es complicado, estresante o una pesadilla presupuestaria.